¿Por qué se forman las tormentas de verano?

Las tormentas de verano se producen por las altas temperaturas de verano.

Debido a las altas temperaturas, el sol calienta el ambiente y por extensión el aire. Al calentarse el aire, este sube al ser más ligero y se expande por la presión. Ese vapor de agua caliente, en su ascensión, entra en contacto con una masa de aire frío que hace que se condense en gotas rápidamente. Este contraste de frío y calor hace que se originen las tormentas de verano, las cuales suelen ser muy intensas en periodos cortos.

Muchas de estas tormentas son eléctricas y vienen acompañadas de granizo y fuertes vientos.

Las tormentas eléctricas son descargas violentas de electricidad atmosférica que se manifiestan con rayos o chispas, emiten un resplandor breve de relámpago y un trueno. Estas tormentas son muy frecuentes entre los meses de mayo a octubre.

¿Que se recomienda?

Se aconseja no refugiarse debajo de los arboles o esta en contacto con materiales de metal, además es recomendable desenchufar los electrodomésticos.

Para aquellos que hacen deporte evitar estar mojados o húmedos al aire libre. Para todos ellos se aconseja practicar deporte dentro de un recinto o gimnasio.

Quedarse en casa disfrutando de la tormenta descansando en la cama o sofá, con las puertas y ventanas cerradas.

Muchos de nosotros pensamos “esta noche hay tormenta seguro que duermo bien”

Orfeu Boxton investigador del sueño en la universidad de Harvard, explica por qué el sonido de la lluvia contra el tejado o ventanas del dormitorio nos ayuda a conciliar el sueño.

El sonido blanco que nos aporta la naturaleza nos ayuda a dormir mejor y relajarnos, los sonidos del viento, la lluvia o el de los animales son sonidos silbantes que representan la calma.

Desde la prehistoria cuando los humanos dormían a la intemperie o la experiencia de los campistas nos arrojan experiencias de relajación únicas.

Las casas rurales y hoteles cuya principal atracción es transmitir experiencias únicas de relajación y desconexión están ubicadas en este tipo de ambientes naturales. Muchas de ellos ofrecen mantener tu cuerpo y alma en calma. Todos ellos invierte en descanso ofreciendo equipos de descanso con algodón o látex tejidos naturales.

La luz del Sol causa que la retina del ojo envíe impulsos continuos a la glándula pineal, deteniendo la producción de melatonina. Luego, a medida que cae el Sol o directamente es un día nublado o con lluvia, la oscuridad prevalece y los impulsos de luz que se envían al cerebro comienzan a disminuir, por lo tanto, la glándula pineal comienza a segregar melatonina, la cual induce al sueño.

Resumiendo, en un día nublado o con lluvia, el cuerpo se encuentra con la falta de una señal y es como si no hubiera amanecido, a esto se le puede en parte acreditar el típico pensar: “menuda va a caer esta noche hoy me quedo en casita”

Adquirir un colchón que nos acompañe en estos días de tormentas de verano y que nos ayude a disfrutar de este fenómeno natural el cual nos aporta descanso y nos activa el sueño nos ayudara a descansar y disfrutar de las tormentas mientras estamos acostados.

Un colchón adecuado y una almohada son beneficiosos para nuestra salud, con ellos pasaremos parte de nuestra vida, por lo tanto, los colchones que adquiramos durante nuestra vida deben ser aquellos que después de descansar en ellos forma parte de nuestra rutina de descanso.

¿Cuántos tipos de colchones existen?

Los colchones se diferencian por su núcleo y capas, para ello se fabrican colchones de muelles ensacados, colchones viscoelásticos, colchones de látex o colchones completamente naturales.

Para cada tipo de durmiente hay un tipo de colchón, todos ellos nos ofrecen confortabilidades diferentes, por sus firmezas, grosor o medidas.

Es importante el consejo en este sentido, por ello el peso, si dormimos solos o acompañado, si dormimos de lado o al centro, nos ayudara a elegir el colchón más adecuado.

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